jueves, 2 de febrero de 2017

Una puta partidaria de los derechos de las mujeres.

"Tuve una puta llamada Gladdy que era partidaria de los derechos de las mujeres. Marchaba en los desfiles de Filadelfia y de Nueva York cuando había marchas a favor del voto y se ponían alfileres en los caballos de los policías y se hablaba sobre ser iguales a cualquier hombre. Gladdy era una puta muy buena y atraía a los folladores intelectuales con los que hablaba de Shaw y H. G. Wells e Ibsen y muchos rusos de cuyos nombres ya no me acuerdo. Solía andar en bicicleta a lo largo de los diques, con una falda abierta. Siempre estaba recitando algo que llamaba Omar el Tendero. En su tiempo libre Gladdy grababa imágenes de indios y cabezas de chicas sobre almohadas de papel. Alrededor de 1904 se consiguió a un amante negro, un abogado que había ido a la universidad en el norte. Le dije a Gladdy que yo personalmente no pensaba que un hombre fuera peor que otro hombre, sin importar de qué color fuera, pero que la costumbre era la base de nuestro negocio. (...) Gladdy se puso impertinente y me dijo que su semental negro era un gran hombre y un luchador por los derechos, los derechos humanos".

Nell Kimball: Memorias de una madame americana.

No hay comentarios:

Publicar un comentario